«¡¡Oye, hay un chico nuevo que toca como Herbie Hancock!!». Cuando el pianista chileno Matías Pizarro llegó a Argentina huyendo de la dictadura de Pinochet, la noticia corrió como la pólvora en la escena del jazz local.
En los dos cortos años que Pizarro pasó en Buenos Aires, se convirtió en un tercio del proyecto Viejas Raíces junto a los héroes del jazz local. Jorge López Ruiz y Pocho Lapouble, grabaron con el famoso trompetista italiano Enrico Rava y lanzaron su propio álbum en solitario, Pelo de Rata («Pelo de rata»).
Sin embargo, Pizarro no era un principiante. Mientras estuvo en Chile, ya había participado en varios proyectos musicales y trabajado como productor y arreglista para el sello IRT, y estuvo conectado con bandas influyentes como Los Jaivas y Blops. También estudió en Berklee School of Music, donde no solo conoció y convivió con la flor y nata de una nueva ola emergente de músicos, sino que también tuvo la oportunidad de asistir a presentaciones en vivo de gigantes como Miles Davis o Thelonious Monk.
En la grabación de Pelo de Rata Pizarro se une al también chileno Alejandro Rivera (Sacros, Grupo Sol) en quena y charango, el bajista sueco Bo Gathu en el bajo, el saxofonista uruguayo Finito Bingert y un impresionante equipo de percusión con Pocho Lapouble, «El Zurdo «Roizner y el poderoso Domingo Cura. El álbum bebe de las corrientes de jazz fusión estadounidense de la época (piense en Chick Corea y Miles Davies), añadiendo un innegable carácter latinoamericano, todo proyectado a través del propio prisma musical de Pizarro que muestra su agudo sentido de la armonía y una intimidad musical que recuerda a aquellos Momentos sinceros y de ensueño en Viejas Raíces.
El folleto de 8 páginas que acompaña a la edición en vinilo le dará una visión más profunda de la historia de Matías Pizarro, con fotografías y notas inéditas del periodista argentino Humphrey Hinzillo (La Nación, Rolling Stone Argentina).