Continuando con la dedicación de Four Flies a profundizar en períodos menos explorados de la música italiana, Africamore nos lleva en un viaje cautivador a la intersección del afro-funk y el paisaje sonoro italiano durante los seis años comprendidos entre 1973 y 1978, una época en la que la música disco se avecinaba y el horizonte y el mercado de discotecas se expandía rápidamente.
Antes de llegar a las costas italianas, el sonido contagioso procedente de raíces africanas y afrocaribeñas atravesó tanto el Mediterráneo como el Atlántico, aterrizando en las pistas de baile de Nueva York, donde el DJ Dave Mancuso descubrió «Soul Makossa» de Manu Dibango. En 1973, a partir de las fiestas Loft de Mancuso, el ritmo hipnótico de la canción se extendió al resto del mundo, incluida Italia, donde provocó una ola de imitaciones y variaciones.
Las influencias tribales encontraron así su camino en el soul-funk italiano y en los primeros tiempos de las producciones disco lanzadas entre 1973 y 1978, desde melodías con tintes psicodélicos como «Africa Sound» de Jean Paul & Angelique hasta el éxito de club de inspiración afrobeat «Kumbayero» del compositor y productor Albert Verrecchia (también conocido como Weyman Corporation); y desde innovadoras canciones afrocósmicas como «Amore» de Chrisma, coescrita por Vangelis y con los ritmos de la banda de afro-rock ghanés-británica Osibisa, hasta alucinantes canciones como «Why O» de Beryl Cunningham, una re- Escribe sobre «Calypso Blues» de Nat King Cole arreglado por Paolo Ormi, con pausas de percusión que suenan muy parecidas a lo que más tarde se conocería como techno.
Combinando vibraciones placenteras con ritmos impulsores, percusión de estilo mundial e incluso sintetizadores, todas estas producciones traspasaron los límites de la música dance en una época en la que la discoteca aún no había tomado el control. Al hacerlo, sembraron muchas de las semillas de la escena cósmica italiana posterior y su mezcla única de elementos africanos, disco-funk y música electrónica.
Este fue un período breve pero lleno de matices en la historia de la música italiana, uno que merece ser recordado y redescubierto.